martes, 8 de febrero de 2011

Deseo






Vértigo de tu piel desnuda
que sacude mi cuerpo.
Mis ojos se arrebatan
con tu mirada de fuego .

Néctar de la diosa que se atrevió
a amar en la tierra ,
a gemir con el alma
perdiendo sus alas.

Ven a mí esta noche,
sacia mi deseo
con tus labios, con la yema de tus dedos
recorriendo mi vida
y rasgando –puñales de oro-
el interior del espíritu .

No te detengas, oh diosa
de paraísos perdidos ,
el deseo no se calma,
tan solo duerme
y siempre espera .




No hay comentarios:

Publicar un comentario